Con todo lo que está pasando alrededor del mundo, es casi imposible imaginar cuando es que las cosas van a regresar a la normalidad. En España hicieron un experimento en el que los espectadores del mini festival no guardaron ninguna distancia uno del otro, lo más sorprendente que no hubo ningún registro de infección. Esto es definitivamente un aliciente para regresar a la música en vivo este año.  

El experimento fue llamado  PRIMACOV y fue organizado por Primavera Sound en conjunto con el hospital German Trias en Barcelona. El experimento involucró a 1,000 personas en un auditorio con una capacidad de 1,600 personas. De aquí se pone un poco complicado pero en resumen, a esos 1000 asistentes se les hizo una prueba de COVID (todos con resultado negativo), de ahí se eligieron mitad y mitad, unos irían al concierto y la otra mitad sería el grupo de “control” sin acceso a él.  De la mitad que fue al concierto ninguno se infectó (todos usaron mascarillas) de los que no fueron dos salieron infectados (obvio no por el concierto). 

La conclusión de los organizadores del experimento fue la siguiente: 

“Por lo tanto, la asistencia a un concierto de música en vivo realizado bajo una serie de medidas de seguridad que incluían un test de antígeno negativo para SARS-CoV-2 realizado el mismo día, no se asoció a un incremento de las infecciones por COVID-19”.

Estas son excelentes noticias para todos nosotros que tenemos sed y hambre de música en vivo.  Lamentablemente, no sólo se trata de pruebas y experimentos, cosas como pólizas de seguro, regulaciones gubernamentales, etc… La buena noticia es que seguro esto da pauta a que todo regrese a la normalidad. 

Aquí tienes video de Caribou en la edición del 2015 para calmar un poco esa sed de música en vivo.